Para mi, La Peyotera, es una celebración de la vida, un homenaje al pueblo Wixarika (Huichol). Es pura alegría, esperanza y sobre todo una declaración de amor a mi país, México.

Esta inspirada en su bello arte: “tablas de estambre,” el cual, los Huicholes han utilizado desde “el principio,” para decorar diferentes objetos transformados en ofrendas para sus Dioses, con fines rituals.

La Peyotera, con su pintura facial colorida hecha de estrambre, evoca a “Los Jicareros” (Xukurikate) de Tateika, que decoran sus rostro con “Uxa” antes de iniciar su recorrido a Wirikuta, su lugar primigenio, el hogar del Maiz, del Venado, y del Peyote…

Con sus ojos hipnoticos, en trance, La Peyotera nos invita a danzar libremente, a sonreir, y a gritar: estoy vivo!

Symbolismo

Maiz: parte de la “triada” o trinidad Wixarika, junto con el Venado y el Peyote.

Venado: Kauyumari. El que sostiene al Sol y genera “La Vida,” el aliento divino, el origen, La Fuente.

Gotas de lluvia: buena cosecha, alegría, florecimiento espiritual.

Peyote: La Visión, el camino, La Verdad.

Wirikuta : el camino sagrado de la peregrinación más importante del pueblo Huichol. Ofrendas, agradecimiento, fortaleza física y espiritual.

Serpiente: dualidad. Generadora también de buen temporal de lluvias.

Sol: Luz, nuestros antepasados, “el costumbre,” el origen de la Vida. 

Flores: Amor, alegría, gozo, ternura, generosidad, pasión por la Vida.

Y sus ojos encendidos, girando, trayendo a cada uno que la mira fijamente, el recuerdo de “Quien es verdaderamente”.....

l verla, nos diluimos en puro Amor. Extasis total.